Y yo te sonreiré y será la más sincera de mis sonrisas.
No importa el lugar ni las circunstancias, las decisiones que nos lleven ahí serán solo mera casualidad parte de nuestro destino, ese que se llama Tu y Yo.
- Es un hermoso día de otoño, ¿no crees?
- Precisamente eso pensaba - sonrió
- ¿Eres de por aquí? - preguntó tímidamente, ella sabía que debía conseguir una conversación
- Si, unas calles más allá - él no quería dejarla escapar - ¿Y que hay de ti?
- La verdad es que hoy solo quise dar un paseo, me he mudado hace poco.
- ¿Y siempre haces esas locuras de salir sola por ahí? - preguntó con un grado de malicia en sus pensamientos
- Ehh, bueno, la verdad es que es sí - pensaba que quizás la tomaba por una lunática
- Entonces creo que necesitarás a un acompañante, digo... Estos lugares son peligrosos para una chica tan - y se quedó callado, ¿realmente eso iba a decir? - Ehh bueno, solo si quieres.
Corría un silencio a través de esos dos metros que los separaba, él sentado en un sucio balcón público apoyado en sus piernas con sus codos, viéndola, ella ahí parada con los pies cruzados y las manos dentro de su chaqueta.
- Encantada, creo que me hace falta a alguien que cuide de mi. - sonrió.
~ Para un loco amor, que aun esta en mis sueños pero cuya escencia nunca olvidaré.
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Pedacitos de corazón